A lo largo de Junio hemos dado comienzo a la que es posiblemente una de las tareas más divertidas de este proyecto: la creación del Mundo de Vilia.
Crear un mundo no es una tarea sencilla. Y si bien los doce años que llevamos de partida nos han hecho disponer de un buen puñado de mapas y de descripciones de reinos, ciudades y pueblos, es precisamente la diversidad de todo este material la que dificulta la tarea: ¿con qué versión nos quedamos? ¿Cuál tiene más sentido? ¿Qué detalles queremos conservar porque aportan valor a nuestro mundo, y cuáles es mejor dejar en segundo plano a la espera de una nueva idea con que sustituirla?
Existe tanto material que durante la definición de objetivos del proyecto nos costó decidir cómo abordarlo. Pero al final, como todo, es necesario empezar por algún sitio.
Metodología
Muchos libros y manuales de rol, tales como la Guía del Dungeon Master de D&D 3.5 ó el Gamemaster’s Law de Rolemaster, sugieren dos métodos para llevar a cabo la creación de un mundo: desde abajo hacia arriba (bottom-up) o desde arriba hacia abajo (top-down).
Bottom-up
El primer método propone comenzar en una zona pequeña y manejable, tal y como el pueblo donde comience su carrera un grupo de personajes, e ir definiendo elementos a medida que vayan siendo necesarios para la aventura: el señor de la ciudad que les pida asegurar las minas de las que sobrevive el asentamiento, las propias minas, la campiña alrededor… Posiblemente, tres o cuatro sesiones más adelante, sea necesario que los personajes viajen a un pueblo cercano, y haya que definir la interacción que tienen ambas villas y la relación política que existe entre ellas. Un par de niveles más tarde quizás sea interesante definir la capital del reino, sus dirigentes y alguna facción de nobles interesante que sirvan de telón para una aventura de intriga política, justo antes de pasar a defender estas tierras de la invasión de un reino vecino, no mencionado hasta ahora.
Este método destaca por lo práctico que resulta, ya que un Director de Juego tan solo necesitará preparar lo justo y necesario para darle sabor y color a sus aventuras. El esfuerzo será incremental a la capacidad de los jugadores de llegar a otros lugares y conocer nuevos enemigos, por lo que a niveles de poder bajo lo hace muy manejable. Al mismo tiempo, requerirá de una imaginación activa por parte del DJ para poder inventar detalles «al vuelo» en caso de ser cuestionado por sus jugadores y no tenerlos preparados. Si es capaz de anotar esos detalles y de mantenerlos ordenados, es probable que el mundo que se genere mantenga un buen nivel de coherencia.
Así es como comenzó Vilia en sus inicios: si bien contábamos con un pequeño diagrama general de cómo eran los continentes principales, esbozado en la esquina de un cuaderno de Inglés, el primer mapa que creamos fue la ciudad costera de Cartago, donde comenzó el primer grupo de personajes.
Top-down
Por otro lado, el método de top-down se basa en la definición más general del mundo para ir entrando en detalle, poco a poco, de cada una de las regiones, culturas y características que lo componen. Partiendo de un mapa del mundo en su conjunto, definiríamos la geografía general, la temática, la población y los conflictos principales de cada zona. Esta definición será general: una mera mención a los accidentes geográficos más importantes tales como:
- Montañas
- Ríos
- Bosques
- Desiertos (tanto cálidos como helados)
A estos aspectos los seguiría una descripción general del clima, el o los tipos de criaturas u organizaciones más importantes que habiten allí (reinos, imperios, organizaciones políticas o religiosas significativas, criaturas de gran poder, etc), y los conflictos actuales o previos más relevantes que vayan a definir el sabor de esa región: ¿qué reinos están en gerra? ¿Qué regiones poseen más avance tecnológico o mágico? ¿Cuál es el principal desafío por el que están pasando actualmente? ¿Qué tipo de objetivos se han marcado en el pasado o se marcan actualmente en esa región? ¿Hay culturas expansionistas? ¿Hay zonas más deshabitadas o de organización más laxa?
Todas estas consideraciones y otras muchas definirán la temática de cada región del mundo que acabemos de crear, marcando la pauta para que podamos centrarnos en una sola región o zona y repitamos el proceso: geografía, divisiones territoriales, culturas, conflictos, intereses… Así sucesivamente, pudiendo llegar a crear barrios dentro de una ciudad, bandas criminales dentro de un barrio, y facciones dentro de una banda criminal, si es preciso.
Ni que decir tiene que este método requiere una inversión de tiempo, esfuerzo y organización enormes, al menos para llegar al nivel de detalle propuesto en todas las regiones definidas del mundo. Esto lo convierte en un modelo teórico de trabajo que, si bien ayuda a asegurar un mundo consistente y coherente, requiere manejar cantidades ingentes de información y una dedicación casi exclusiva por parte del creador o creadores.
Al menos, si estos creadores son una sola persona o un grupo pequeño.
Volviendo a Vilia
En nuestro caso, para llevar a cabo la creación de Vilia hemos optado por una mezcla de ambos estilos: hemos comenzado por un top-down, ya que estamos trabajando para definir el mundo en general y otorgarle un sabor y una dirección a cada una de las regiones que la conforman. Pero al mismo tiempo queremos detenernos poco después, sin querer bajar demasiado el nivel de detalle en muchas zonas, y centrándonos en encajar las que ya tenemos creadas y en definir aquellas en las que queremos contar nuestras historias de forma más inmediata (lo que corresponde con una aproximación bottom-up).
Esto significa que, si bien vamos a entrar a definir la región de Terra Norte, por ejemplo, al nivel de detalle de los reinos que lo forman, dando contenido a muchas de las ciudades y pueblos que allí existen, existirán regiones que apenas tocaremos más allá de definir qué tipo de geografía y clima se puede encontrar. Gaia y la región de Terra Suroeste son un par de ejemplos de esto.
Hay varias razones que nos empujan a actuar de esta forma: la primera, que no disponemos de un tiempo y unos recursos infinitos. Además, nos interesa definir y trabajar aquellas regiones que son más importantes para cada una de nuestras respectivas historias, por lo que tener el grupo del Proyecto Vilia para aportarnos ideas y ayudarnos en la definición es una gran ayuda. Y para terminar, el Proyecto Vilia se ha creado con el objetivo de llevar la creación del mundo más allá del propio grupo de organizadores y creadores iniciales. Aspiramos a poder invitar a quienes estén interesados a aportar ideas y crear zonas de Vilia que todavía nadie haya pisado: quizás un continente, o un reino; quizás un valle o una comarca de pequeños pueblos granjeros, o una región de la infraoscuridad o una ciudad voladora; quizás todo un plano, o solo los vecinos de una calle de la ciudad de Cartago.
Nos apasiona pensar en las historias que pueden tener lugar en este pequeño mundo que estamos creando. ¿Estás interesado en el Proyecto Vilia? ¡Descubre más sobre él!